sábado, 26 de junio de 2010

125 Dibujar con fuego

Para el experimento nº 125 de “fq-experimentos” contamos con la colaboración extraordinaria del artista sevillano D. Juan Delgado.

Espero que os guste.

Materiales: zumo de limón, un pincel, una hoja de papel y una vela.

Para dibujar sobre la hoja de papel usamos zumo de limón diluido en agua.
Terminado el dibujo, esperamos unos minutos a que se seque el zumo de limón.
Al secar completamente el zumo de limón se vuelve invisible.

Por último, calentamos la hoja de papel acercándola a la llama de una vela.
En unos segundos se hace visible nuestro dibujo.

Precaución: Es necesario mover continuamente la hoja de papel para evitar que se queme.

Explicación
Al calentar el zumo de limón se oxida y se vuelve de color marrón.
Esta técnica se puede emplear para ocultar mensajes (tinta invisible)


miércoles, 16 de junio de 2010

124 Un airbag casero

Para realizar nuestro experimento necesitamos una bolsa de plástico pequeña, otra bolsa más grande con cierre hermético, bicarbonato, vinagre y un martillo.

1 Llenamos la bolsa pequeña con vinagre

2 Cerramos la bolsa con un nudo

3 Ponemos bicarbonato en la otra bolsa.

4 Metemos la bolsa pequeña dentro de la bolsa grande, procurando que queda rodeada de bicarbonato.

5 Y por último, cerramos la bolsa grande y ya tenemos nuestro airbag casero.

Si golpeamos con un martillo sobre la bolsa pequeña se produce una reacción química con desprendimiento de gases que llena la bolsa grande.

Explicación
Al romper la bolsa pequeña entran en contacto el vinagre y el bicarbonato y se produce una reacción química con desprendimiento de dióxido de carbono. Dependiendo de la cantidad de vinagre y de bicarbonato la bolsa tardará más o menos en llenarse.

Si se desprende mucho gas la presión puede llegar a romper la bolsa.


domingo, 6 de junio de 2010

123 El Ave Fénix

Para realizar nuestro experimento necesitamos una bolsita de te y un mechero.


En primer lugar retiramos el hilo de la bolsita y sacamos el contenido de la misma. Luego estiramos la bolsita con los dedos y le damos forma de tubo.
Por último colocamos la bolsita verticalmente sobre una mesa y pegamos fuego en la parte superior.
La bolsita se quema y queda reducida a cenizas en pocos segundos. Pero entonces se eleva y alcanza una altura considerable.

Explicación
Entre las cenizas de la bolsa quemada queda atrapado aire caliente que asciende gracias a las corrientes de convección.